Es por eso que raramente somos conscientes de hasta qué punto consigue la publicidad borrar la personalidad de cada uno de nosotros para hacernos partícipes de un modelo colectivo de comportamiento. Son estas imágenes con un alto poder persuasivo nos hacen consumir tales productos. Son también responsables de fomentar la ambición y el deseo de poseer más, haciendo que nos sintamos continuamente insatisfechos por no poseer algún producto nuevo del mercado.
Como veremos en esta publicidad, nos presentan las virtudes de la zapatilla Nike vs. Otra común. Sin embargo la manera de comunicarla es sutil y atractiva. Algo dinámico y creativo por la canción. Al final de verlo te preguntas. “¿en verdad puedo hacer o correr todo eso, si tengo esas Nike’s?”.
Y al lograr entrar en la psique del público, la publicidad logro su objetivo, el meternos ese bichito de querer tenerlos.
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